El powerlifting me ha enseñado a que los días malos, los días buenos o los días regulares tienes que cumplir si quieres llegar a algún lado, si quieres tomarte esto en serio, no importa cual cansado estés, habrá alguien que estará entrenando, mientras tu te quejas y eso es en todas las disciplinas, en tu trabajo y vida diaria.
Mientras estés cumpliendo, echandole huevos y te sientas orgulloso de lo que haces, una derrota no determinará lo que eres.